CALIBRE (2018) – RESEÑA

Calibre

Dirigida por Matt Palmer y protagonizada por Jack Lowden y Martin McCann. Dos viejos amigos se van de cacería un fin de semana, un giro inesperado cambiará el rumbo de sus vidas para siempre. Esta es la premisa de la nueva propuesta que nos trae Netflix, esta vez oriunda de Escocia. Lo sorprendente de Calibre recae por completo en que es la ópera prima de su director.

Quien viene de dirigir tres cortometrajes de horror y que con esta película se adentra en un suspenso macabro que por poco menos de dos horas te secuestra delicadamente para sumergirte en la incertidumbre. Calibre nos presenta un escenario real, con personajes reales y situaciones reales, lo que torna la narrativa en algo fluido y totalmente posible. Esta cotidianidad de un lugar remoto y montañoso, pero que de alguna forma no termina de esclarecer su característica de acogedor, forma parte esencial de lo que se cuenta. 

La frialdad de la ubicación va de la mano con la frialdad de los personajes y de la historia. De alguna forma me hizo recordar a la serie Ozark. Con una presentación de planos generales para hacer énfasis en lo lejano, desde un principio el filme se encuentra presentándole dos opciones al personaje principal, para luego obligarlo a tomar una de ellas. 

Que si se va de cacería o no, que si engaña a su esposa o no, que uno o el otro, liderándonos, sin darnos cuenta, a un sorpresivo y chocante final que se amarra de este estilo narrativo. Con muy buenas actuaciones y un tremendo manejo del suspenso, Calibre es una propuesta interesante que posiciona a su director Matt Palmer en el radar. Disponible en Netflix. Recomendada por mi hermano Fernando Peña.

Calificación personal: 8/10.