PEAKY BLINDERS: TEMPORADA 1 (2013) – RESEÑA

Peaky Blinders Season 1

Y aquí pensaba yo que era imposible que una serie escalara para convertirse en otra más de mis realmente favoritas (contadas con una sola mano). Y mucho menos con una sola temporada. Peaky Blinders, la historia de la familia Shelby, principalmente el hijo mediano Thomas Shelby, una familia de mafiosos que escala su camino en el mundo de la mafia y los negocios en Inglaterra durante principios de siglo XX.

Increíblemente presentada, la serie esconde lo mugroso de su ubicación tras una puesta en escena perfecta, genialmente dirigida e iluminada, cada plano se convierte en un cuento distinto que habla por sí solo. Con una historia que plenamente te atrapa, te intriga, te entretiene y te recuerda a grandes clásicos del género mafioso. Veía capítulo tras capítulo y aunque quisiese no le encontraba un punto negativo. 

Sin tener que resaltar todos sus otros aspectos, debo de puntualizar lo que hace que esta serie trascienda y se convierta en un must-watch para todo el que está leyendo esto. Su trabajo actoral, el elenco y como este congenia a la perfección con cada uno de los personajes magistralmente pensados, escritos, actuados y desarrollados. 

Comenzando con quien se ha convertido desde ya en uno de mis personajes favoritos de toda la pantalla pequeña, Thomas Shelby por un magnífico Cillian Murphy, hasta la más mínima aparición, cada trabajo de personaje actúa con una motivación o desmotivación dependiendo de su pasado, su presente y lo que quiere para su futuro siempre pensando en la mentalidad inglesa post Primera Guerra Mundial, lo que crea una impecable presentación de una época verdaderamente oscura y donde la mafia crudamente prosperó. Simplemente IMPERDIBLE. Ansioso por lo que me espera en las próximas temporadas.

Calificación personal: 10/10.