Dirigida por M. Night Shyamalan y protagonizada por James McAvoy. Split funciona por momentos cuando la técnica de Shyamalan es presentada en pantalla, desde aquellos encuentros cercanos con el lente de los actores, como la vista de espacios estrechos y reducidos.
McAvoy nos entrega lo que pudiera ser su mejor interpretación hasta la fecha, creando, personalidad tras personalidad, un sentimiento exquisito de incomodidad y asombro en la audiencia. Por otro lado, los demás aspectos de la historia y/o del filme tuvieron sus fallas, pues aunque se abarcó sobre una vista más amplia del problema del personaje principal, no fue suficiente como para crear una credibilidad, el elenco femenino, en mi opinión, no presentan lo suficiente como para aportarle tanto a la historia que se está contando, ni la forma en la que se cuenta, creando un poco de confusión en algunos muy buenos momentos de tensión y suspenso. Y debo de confesar que la última escena fue inesperada.
Calificación personal: 6/10.