La realidad es que la gran mayoría de los males no se pagan de inmediato, y más duele nuestra capacidad de flagelarnos sobre el cargo de consciencia que lo que podrían doler las consecuencias. El homenaje de Spike Lee a la guerra de Vietnam, a los soldados afroamericanos caídos y al trauma que se arrastra a través de todos los años de vida de sus sobrevivientes brilla por aquel peculiar estilo de Lee, pero se cae al tener que mostrar una línea coherente de eventos que se desconectan por completo de donde se encuentra la emoción de su historia.
“Da 5 Bloods” me deja el inevitable sabor de lo impresionante que pudo haber sido un documental sobre los soldados afroamericanos en la guerra de Vietnam dirigido por Lee. Sus secuencias retrospectivas son lo mejor de la película, no solo porque muestran aquel inmenso Chadwick Boseman, sino porque nos conectan a una realidad distante de la cual no sabemos mucho. ¿Cuál era el “heroísmo” detrás de estos soldados? ¿Qué tanta era su lucha, su aspiración para con el futuro y qué estaban dispuestos a hacer?
En su otro tono, aquel que le da inclusión a la comedia y se establece como una búsqueda de tesoro, la película hace un gran trabajo para introducirlo, pero se pierde en el resultado. Toma mucho de sus fuerzas para concentrarse en los traumas que terminan justificando la retrospección, pero le restan a nuestra conexión con los personajes recientes. De alguna manera no sentimos el merecimiento del tesoro en ellos, sino que se ven arropados por sus males, sus frustraciones y/o avaricia.
Repleta de un discurso socio/político que ya es parte de la marca de Spike Lee, lo que me gusta es que a este punto ya su director no lo esconde. Utiliza sus planos, diálogos, personajes, vestuario, ubicación y música para gritar que ya es suficiente, abundando en la redundancia de cómo todas sus películas de alguna u otra forma muestran la responsabilidad de Lee de hablar sobre esto.
Delroy Lindo, al traernos el personaje más complejo, mantiene una actuación impecable que por momentos se divorcia de tus ganas de conocer el personaje, es como si su historia no te interesa lo suficiente pero de alguna manera el actor ha logrado hacer que te interese. En general estaba muy emocionado con el estreno de “Da 5 Bloods”, pero no pude evitar sentir que no estaba lista para estrenar. Su ritmo se sentía apresurado, lo que por momentos hacía sentido pero por la gran mayoría de ellos no.
Incontables homenajes al cine de guerra, principalmente a “Apocalypse Now” que, al ubicarse en la misma guerra, le dio libertad a Lee de mostrar lo que pudiéramos decir es “su propia versión de los eventos”. Innecesariamente larga, el estilo de su director es lo mejor de la película, la forma en cómo crea fraternidad entre sus personajes por ubicarse en un contexto muy específico. Pero me parece que la historia en presente pudo ser mejor tratada, para, con la misma violencia, mantenernos conectados y no sentir como que la historia también se perdió en aquella jungla.
Calificación personal: 6/10.