HOUSE OF CARDS: TEMPORADA 6 (2018) – RESEÑA

House of Cards Season 6

Dentro de las muchas cosas que he tenido la oportunidad de ver este año, en un gran recuento de series pendientes que tenía años sin ver, finalmente tuve la valentía de experimentar la sexta y última temporada de “House of Cards”. Quizás ahora puedo externar con mucho más énfasis mi cruda opinión de que probablemente Netflix debió mantener la quinta temporada como última entrega, aunque la historia como tal no haya tenido conclusión.

Y es que esta temporada no solo se aleja por completo de lo que una vez definió a “House of Cards”, sino que es probablemente una de las aberraciones más grandes que jamás se hayan cometido en la historia de las series televisivas. Un intento de cierre apegado a una inmensa corrección política, una historia que lanza por la borda miles de subtextos mencionados en temporadas anteriores, que hace caso omiso a un desarrollo de personajes de cinco temporadas y que inevitablemente se arraiga de una vaga decisión de eliminar a su protagonista de la manera menos creativa que existe.

House of Cards Season 6 2

Para mí, y para muchos seguidores de la serie, House of Cards representaba el vistazo más real de la política estadounidense en la pantalla pequeña, y probablemente el cine. Protagonizada por un gigantesco Kevin Spacey que nos dio uno de los primeros grandes antihéroes de la TV y de Netflix.

Y no me mal interpreten, Robin Wright también fue por mucho tiempo de lo mejor de esta serie, pero esa última temporada es una de las más grandes decepciones que me ha dado una serie, o el cine por así decirlo.

Calificación personal: 4/10.