19 años después, Edward Norton regresa a la silla del director con “Motherless Brooklyn”. Una película cuyo mayor esfuerzo es su ubicación, Nueva York de los 1950s. Donde una musica impecable y un siempre grandioso Bobby Cannavale intentan a sobremanera darle un resquicio de esperanza a esta fallida película de crimen y misterio.
Norton no alcanza la capacidad de brindarnos un protagonista apelable, y lo que nos presenta es la desesperación disfrazada de persona. Los saltos entre el crimen organizado, el racismo y la política hacen que la película tenga gigantescos problemas de ritmo y tono. Esta se la pueden saltar.
Calificación personal: 4/10.