La última temporada de una de las series mas subestimadas que tiene la pantalla pequeña. Una serie de piratas donde la bandera negra, el trasfondo de personajes, y el diseño de producción logran tele-transportarte por completo a un Caribe durante el siglo XVIII. Ejemplarmente ubicada, esta temporada logra concretar un final agridulce acorde a cada uno de estos personajes y las historias que nos vienen mostrando desde hace ya mas de 3 años.
Con grandes secuencias de batallas navales, una ejemplificación casi exacta de la muy llamada “Era Dorada de la Piratería”, tácticas de guerra, mitos, monarquía, sociedad y personajes excelentemente motivados y llevados dentro del universo, muchos de estos siendo inspirados en figuras reales de la historia.
Técnicamente muy bien llevada con estándares de calidad superiores tomando en cuenta su plataforma de pantalla pequeña, uno de los aspectos mejor tratados es la banda sonora, encargada de liderar cada una de tus emociones a través de momentos emocionantes, y otros no tanto. Black Sails nos permite vivir quizás la experiencia más exacta que ha traído el cine sobre este apasionante y muy rebuscado tema de la piratería.
Pero no desde una perspectiva barata y ficticia, sino desde un punto de vista real. Su ultima temporada contempla todos los aspectos que hicieron crecer la serie desde sus inicios, pues a diferencia de muchas, cada temporada de Black Sails supera la anterior. Soy fanático de la historia y mucho de esto se traduce en mi pasión por el cine. Contenido que se inspira en hechos reales del pasado me apasionan muy personalmente, a la hora de empezar a ver Black Sails la razón fue una intriga personal, y a la hora de acabarse, la despido con un sabor amargo de una muy buena serie que no volveré a ver. Muy recomendada gente.
Calificación personal: 9/10.