¿Cómo se compra el tiempo? Porque si la imposibilidad de cuantificarlo no hace que el delito más grande sea el robo de este, no hay mayor injusticia. Porque aunque duele ver la historia de cinco niños a quienes les robaron un pedazo de sus vidas, es aún más doloroso pensar en los incontables casos sobre los que no se ha hecho, o no se hizo, justicia. La historia de los Central Park Five, dramatizada en una serie limitada que brilla por su excepcional puesta cinematográfica, grandiosas actuaciones y una música que oscila entre la realidad y lo querido. Pero por igual, una serie limitada que verdaderamente trasciende por reflejar la más grande de las injusticias desde una perspectiva emocional y personal. Porque cuando menos lo piensas, te encuentras retorcido en la impotencia, con los ojos aguados en dolor y el corazón lleno de furia.
When They See Us nos cuenta la historia verdadera de como, en 1989, cinco niños afroamericanos/latinos fueron vinculados a un caso de violación e intento de asesinato. De manera fáctica, sobre eso va la serie, pero realmente lo que hacemos es empatizar de una manera extraordinaria con las historias individuales de cada uno de estos niños. Sus problemas en la casa y como cada una de sus familias, dependiendo de sus antecedentes, reaccionan de manera distinta a la tragedia de lo sucedido. Pero mientras todo esto pasa, nos vamos incursionando e las distintas etapas del proceso que se traducen a distintas etapas de impotencia y tristeza, desde la irritante "investigación", la acusación y hasta los años perdidos.
Con una ambientación y un elenco verdaderamente impresionantes, la empatía y conexión llega al nivel de que es difícil dividir la ficción de lo ocurrido, es difícil no pensar en el caso sin pensar en las caras que presenta la serie como los figurantes de esta historia. El dolor, la furia, la impotencia, los errores, el amor y la pérdida son transmitidos de manera tan eficiente que nosotros mismos como audiencia nos sentimos culpables de que en algún momento de la historia, y hasta ahora mismo, casos como este puedan ocurrir debido al egoísmo y la cultura de odio y división inculcada en la zapata de una sociedad corrupta y podrida como la que permitió que esto ocurriera.
La necesidad de inculcar en el guión, aspectos sobre la política actual, son el único punto en contra que le puedo encontrar a la serie. Su lenguaje cinematográfico e historia hablan lo suficientemente alto como para aclarar un punto que aun 30 años después no está corregido. La dirección de Ava DuVernay es prácticamente perfecta, utilizando simbolismos y manejando el tiempo de manera tan efectiva que se sentía como un repentino infarto de esperanza cuando pasábamos de un episodio a otro, así como también representando todo lo vivido, pero a la vez también perdido, en estos años de la vida de estos jóvenes. Probablemente uno de los mejores trabajos que he tenido la oportunidad de ver sobre esta verdad, aclarando que acabé de verlo completamente destrozado.
Calificación personal: 9/10.